martes, 1 de junio de 2010

La tarea ciudadana

Si seguimos por el camino de las facturas nunca dispondremos de las imprentas suficientes para imprimir la gran cantidad de talonarios que seguramente serán necesarios para que cada sector o cada cual cobre la suya frente al adversario.

Venezuela no puede mantenerse en la ruta de la revancha o, mejor dicho, del revanchismo, de la exclusión, del maniqueísmo que nos pone entre la espada y la pared, o lo que es lo mismo, entre la incondicionalidad y la traición, sin opciones intermedias. Durante largos años hemos vivido bajo la confrontación sin cuartel, sin el derecho a observar matices o a razonar si el argumento del adversario es válido o si el de algún aliado, incluido el líder o los líderes de ambos bandos, es equivocado, insuficiente o está desfasado.

Cualquier duda a lo interno es traición, tan o más grave que cualquier actitud de diálogo, de reconocimiento del otro o de autocrítica por errores o excesos cometidos. Y, lamento decirlo, desde el gobierno del presidente Chávez se insiste en mantener este escenario, aunque la realidad ya está dando la posibilidad de mirar otros panoramas que poco a poco se abren camino.

Mientras la sociedad comienza a despolarizarse, el Gobierno lucha por mantener la polarización como vía para frenar el descontento y la desesperanza, que toma cuerpo en el propio seno de los venezolanos que respaldan el PSUV o militan en él, tan víctimas hoy de la inseguridad, de la pérdida del valor adquisitivo del bolívar, del deterioro de programas sociales emblemáticos o del crecimiento del desempleo como lo son quienes adversan a Chávez y su gestión.

El Gobierno lucha por mantener la polarización como vía para frenar el descontento y la desesperanza, que toma cuerpo en el propio seno de los venezolanos que respaldan el PSUV.
Hay cada vez mayores coincidencias frente a temas puntuales entre ciudadanos que ya no ven en las posiciones extremas la salida a los graves problemas del país.

Los venezolanos queremos cambios que apunten a la justicia, a la búsqueda de igualdad de oportunidades, pero no queremos un esquema de gobierno o un modelo de Estado que se base en el autoritarismo y en la existencia de poderes públicos eunucos, sometidos a una sola voz, al ordeno y mando.

Creo que buena parte de los venezolanos, indistintamente de su posición política, ya no acompaña la idea de que para solucionar los problemas es necesario encontrar un enemigo a quien enfrentar y a quien achacarle los males.

La épica del discurso político se agota frente a la urgencia de que alguien se ocupe de atender el deterioro de los servicios públicos, de acabar con el imperio de la inseguridad y la delincuencia, o de ponerle coto a la incontrolable inflación.

No dudo que el Gobierno, y especialmente el Presidente, mantiene todavía un importante porcentaje de fidelidad, pero nunca como antes. Ni en cantidad ni en intensidad.

Algunas iniciativas políticas van haciendo mella por lo que implican. Por ejemplo, las expropiaciones, o el caprichoso y peligroso enjuiciamiento de figuras críticas.

O la anulación arbitraria de candidaturas electas por las bases peseuvistas. O el barrido a cualquier vestigio de diversidad en la Asamblea, como ocurrió con la destitución del vicepresidente José Albornoz. O el maltrato verbal contra un sindicalista bolivariano de la empresa Polar, por defender los puestos de trabajo.

Todo se resume en la sustitución del consenso, del debate de ideas o del reconocimiento de quien piensa ligera o sustancialmente distinto, por la decisión arbitraria, unilateral e individual.

¿Qué podemos hacer frente a esto? Por lo pronto elegir una Asamblea Nacional diversa, que recupere su poder contralor y su condición de órgano autónomo, y que actúe sin apego a extremismos de ninguna especie, y con sujeción absoluta a la carta magna.
Un parlamento para todos.
Esa es la tarea ciudadana.
La tarea ciudadana
Vladimir Villegas
“El Nacional”

martes, 30 de marzo de 2010

Preguntas de un trovador que sueña

A Bertold Brecht, por sus Preguntas de un obrero que lee

Si el flautista de Hamelín partiera con todos nuestros hijos ¿comprenderíamos que se nos va el futuro?

Si ese futuro que se nos va supiera adonde lo lleva el flautista de Hamelín ¿partiría con él?

Si un huelguista de hambre exigiera que Obama levantara el bloqueo ¿lo apoyaría el Grupo Prisa?

Si los miles de cubanos que perdimos familia en atentados de la CIA hiciéramos una carta de denuncia ¿la firmaría Carlos Alberto Montaner?

Si algunas firmas meditaran antes de condenar las cárceles ajenas ¿resultarían incólumes las propias?

Si un líder del norte es un líder ¿por qué es caudillo el que nació en el sur?

Si la política imperial es responsable de algunas de nuestras desgracias ¿no deberíamos liberarnos también de esa parte de la política imperial?

Si condenamos la guerra fría ¿nos referimos a toda o sólo a la porción ajena?

Si este gobierno ha sido tan malo ¿de dónde ha salido este pueblo tan bueno?

Aborto (marque con una cruz): asesinato, hedonismo, piedad

Homosexuales (marque con una cruz): Elton John advierte que Cristo era gay

¿Quién le importa al PP? (marque con una cruz): ¿Zapata o Zapatero?

Si la Casa Blanca devolviera Guantánamo y acabara el embargo ¿qué posición (común) adoptaría
el Kama-Sutra europeo?

Si el que hoy maldice ayer bendijo ¿con quién pasó la noche?

Si de veras nos haría tanto daño una amnistía ¿por qué no me lo explican?

Si la suma de ambas intransigencias nos extingue y la nada baldía nos arrastra al pasado ¿nuestros hijos tendrán lo que merecen?

¿Qué pasa con los negros? ¿Qué pasa con los amarillos?¿Qué pasa con los blancos? ¿Qué pasa con los rojos, con los azules e incluso con los hombrecillos verdes?

Si alguien roba comida y después resulta que no da la vida ¿qué hacer?

Si otro Martí naciera entre nosotros ¿podría ser emigrante, rapero, cuentapropista, ciudadano provincial en una chabola periférica?


Patria, Universo, Vida, respeto al semejante

y todos Venceremos un poquito


Silvio Rodríguez

21 de marzo de 2010

viernes, 11 de diciembre de 2009

20 años contigo, 20 años por Chile.Ni un paso atrás¡ La derecha no gobernará en Chile¡

Logros de la Concertación:

A fines de los ochenta, el 45% de los chilenos vivían en la pobreza. Hoy, esa cifra se ha reducido a menos del 15%.

· A comienzos de los años 90, una familia de clase media disponía de un ingreso real que era casi la mitad del que goza hoy.

· En 1993, un 73% de los trabajadores asalariados cotizaba en AFP, hoy lo hace un 85%. En la mayoría del los casos, el jefe de hogar mantiene una relación comercial estable y un 76% se emplean bajo la forma de contrato indefinido.

· Al final de la dictadura, Chile tenía una inflación de 19%. El promedio de los últimos 10 años es de 3,3%.

· El acceso al crédito para las familias ha aumentado. En 1990, sólo un 20% de los créditos iban a personas. Hoy esa cifra llega a 35%.

· En el año 2006 existían 781 salas cunas públicas. Hoy existen 4.281. La oferta para familias de bajos ingresos creció 5 VECES.

· En el año 2005, había 209 comunas en Chile sin oferta de salas cuna. Esto se redujo a 35 comunas el año 2007. Al finalizar este año, serán sólo 14 comunas en todo Chile. Y seguiremos avanzando para llegar a 0.

· La cobertura de la alimentación gratuita diaria en el colegio alcanza hoy un 65% de cobertura, incorporando a parte importante de los hijos de la clase media.

· Este año, 60 mil niños de 7º básico recibirán gratuitamente computadores personales.

· Si entre 1973 y 1990 el número de estudiantes universitarios prácticamente no aumentó, de 1990 en adelante su número creció 4 veces. Hoy, 7 de cada 10 estudiantes son la primera generación de sus familias en acceder a la Educación Superior.

· Este año, el Crédito con Aval del Estado para la educación superior beneficiará a más de 140.000 estudiantes.

· En 20 años, el gasto en salud por habitante ha crecido en promedio un 7% anual.

· Las atenciones médicas han aumentado un 53% en los últimos 10 años.

· La mortalidad infantil en 1990 era de 16 niños por cada 1000. Hoy, es sólo de 6.

· La esperanza de vida promedio entre 1985 y 1990 era de 72 años. Hoy, es de 78.

· El Fondo Nacional de Salud (FONASA) atiende al 73% de los chilenos.

· Desde el inicio del plan AUGE el año 2005, las patologías cubiertas han pasado de 23 a 56 y el número de problemas de salud atendidos con garantía alcanza los 7 millones de casos.

· En 1990, el déficit habitacional afectaba al 17% de las familias. Hoy ese déficit es de sólo un 3%

· En 1990, el 65% de la población de clase media era propietaria de su vivienda. Hoy, un 72% lo es.

· Desde el inicio de la Reforma Previsional, el año 2008, más de 600 mil chilenos y chilenas reciben Pensión Básica Solidaria.

· Este año, comenzó la entrega de un bono de 300 mil pesos por cada hijo nacido vivo, para mejorar la pensión de todas las mujeres que hayan sido madres. El 61% de las beneficiarias de este bono pertenece a la clase media.